¿CONTINÚA LA "OPERACIÓN AMAZONAS"?

POR AURELIO SUÁREZ MONTOYA

 

Cuando Gossaín leyó el célebre editorial del 14 de julio de 2010 en RCN, develando maniobras ejecutadas por el G3 del DAS, se conoció de las operaciones Amazonas, Transmilenio, Bahía y otras similares. Respecto a la primera, el propósito era "el desprestigio" de la oposición política, como vincular a Carlos Gaviria con las FARC y a otros dirigentes del Polo Democrático Alternativo con narcotráfico y desfalcos financieros. Con la práctica de estas y distintas aberraciones, el DAS se tornó, echando al traste mínimos democráticos, en auténtica policía política.


En la "operación Amazonas" se buscaba "desinformar a la población sobre los detractores del gobierno, generar división en los movimientos de oposición, impedir la materialización de escenarios convocados por opositores y propiciar un 'transbordo' ideológico". (http://www.aporrea.org/internacionales/n155343.html). Todo esto se hizo invocando la protección del Estado.

Los tiempos de la "operación Amazonas" no parecen idos. Los informes de los medios de comunicación sobre la reunión de la Dirección Nacional del PDA, celebrada en Bogotá el 4 y 5 de febrero, los rememoran. Un periódico de cobertura nacional vio salirse de dicha reunión, por contradicciones con las mayorías, a 60 personas en tanto una cadena radial registraba apenas diez. Otra crónica, que titulaba sobre "profunda división" en el Polo, señalaba en el texto que de un total de 260 miembros de esa Dirección Nacional se habían retirado dos, los mismos que desde mediados de 2010 habían renegado de la organización, llamando a votar por "los verdes". Otro disidente resultó ser alguien que dejaba el Polo porque había decidido establecerse en otro país.

En Colombia se volvió norma que quien quiera "mojar prensa" solo necesita hablar mal del Polo. Y mientras más grande la mentira, mayor el titular. Los micrófonos, los destacados y las cámaras se bridan con largueza a quienes vociferen que "el Polo atraviesa la peor crisis de su historia".

Ninguna información resaltó que el Polo ratificó su oposición al gobierno de Santos, que no lo distraen "los buenos modales" con los cuales es sucesor de Uribe camufla su acendrado neoliberalismo; que se trazó una estrategia electoral para extenderse como nunca antes por la geografía nacional y propiciando alianzas programáticas regionales que coadyuven a tal fin; que se acogerán los fallos de la Justicia en el juzgamiento de las conductas de afiliados que desempeñan funciones públicas; que "encinturó" a quienes queden elegidos para responderle al Ideario del Partido.

La manipulación informativa, típica de épocas de "garantías hostiles", induce a pensar que continúa la "operación Amazonas"; algo que no suena tan extraño si se tiene en cuenta que los asesores de comunicaciones contratistas del Departamento de Estado siguen vigentes y la dirección del DAS está ocupada por presuntos participantes en las "empresas criminales" de marras.


Bogotá, febrero 14 de 2011.