EL PREVARICATO DEL PROCURADOR ALEJANDRO ORDÓÑEZ NO ME SILENCIARÁ NI SILENCIARÁ A COLOMBIA
Jorge Enrique Robledo Castillo
robledoje@senado.gov.co


1. Acusaré por el delito de prevaricato a Alejandro Ordóñez, Procurador General de la Nación. En lo penal, lo haré ante la Fiscalía, y en lo disciplinario, ante la Corte Suprema de Justicia, porque este funcionario, el 14 de diciembre pasado, convirtió en "apertura de investigación disciplinaria" la "indagación preliminar" que en contra mía inició el 10 de junio de 2009. Además, le solicitaré a la Corte Interamericana de Derechos Humanos que investigue la agresión de la que estoy siendo víctima.

Demostraré con abundancia de hechos que el Procurador Ordóñez violó las leyes que juró cumplir cuando tomó estas decisiones. Porque no existe una sola prueba que me vincule con la guerrilla de las Farc y sí, por el contrario, en el proceso de "indagación preliminar" reposan pruebas de la policía que demuestran que dicha indagación ni siquiera debió iniciarse y mucho menos agravarse con la "apertura de investigación disciplinaria". No podía ser diferente, porque este senador lleva cuarenta años oponiéndose a la lucha armada en Colombia.

Cuando se levante la llamada "reserva del sumario" sobre este proceso, reserva que en este caso facilita la agresión del Procurador Ordóñez en contra mía, porque me impide informar los detalles del caso, cualquier colombiano podrá constatar que me asiste toda la razón.

2. Este nuevo ataque aleve me confirma que sí hay una conspiración para desacreditarme y cobrarme mis debates en el Senado contra un gobierno corrupto y siniestro. Es llamativo que las dos decisiones del Procurador Ordóñez se den con el presidente Álvaro Uribe en el exterior -en Canadá y Dinamarca- y poco después de mis viajes a Ottawa y Bruselas a oponerme a los tratados de libre comercio por razones económicas y sociales y porque el presidente de Colombia no gana un examen en derechos humanos.

Cuán orgulloso me siento de ser de los pocos senadores que no votamos por Alejandro Ordóñez para Procurador General de la Nación, dada su naturaleza de extremista de derecha y de hombre del presidente Uribe.

3. Es evidente que las decisiones del Procurador Ordóñez, aunque formalmente no constituyan acusaciones, sí me lesionan políticamente, al igual que al Polo, así luego se confirme, como debe suceder, que estamos ante una afrenta a la verdad, porque ningún acto mío justifica esta investigación.

¿A QUIÉN QUIEREN CALLAR?

Si se apartan los sectarismos políticos y se piensa en el país, es evidente que quieren callar a Colombia. Porque no soy solo yo el que denuncia a "agro ingreso seguro"; son millones de colombianos los que quieren un gobierno honesto y no plutocrático. No soy solo yo el que denuncia los negocios de los hijos del presidente Uribe; son millones de colombianos los que buscan un gobierno honrado que les brinde oportunidades a todos. No soy solo yo el que denuncia los inmensos daños que nos causarán los tratados de libre comercio con Estados Unidos, la Unión Europea y Canadá; son casi todos los colombianos los que quieren relacionarse con el mundo pero no como ciudadanos de un país vasallo.

Les pregunto a mis compatriotas: ¿Es un crimen ser colombiano y ser honesto, demócrata y patriota? ¿A dónde llegaremos si por cuidar el rumbo del país se permite que nos aplasten con falsas acusaciones y montajes ridículos? ¿Vamos a mantener refundido el valor para exigir cuentas claras y reclamar contra los negocios turbios? ¿Abandonaremos el derecho a ejercer la democracia, a pensar diferente y a creer que unidos podemos lograr un país mejor para todos y no para unos pocos?

¿QUIÉN NOS QUIERE CALLAR?

Este gobierno y sus conmilitones porque buscan perpetuar su rosca. Pero le digo al presidente Álvaro Uribe, a su procurador Ordóñez y a los otros que intentan silenciarme: temerle a este senador es temerle a Colombia. No falten a la verdad, no actúen con cobardía. Colombia se merece mucho más que eso: acepten un debate digno y consecuente, basado en ideas y principios, como el que llevo casi ocho años dando. El camino más fácil es el de silenciar a los que opinan diferente, pero se sabe que ese camino destruye al país.

¿NOS VAN A CALLAR?

No se hagan ilusiones. Claro que no. Porque este no es un país de estúpidos, porque los colombianos somos gentes de valor y porque sabemos vencer el miedo.

Soy un senador que se esfuerza por representar con dedicación y honradez la dignidad nacional y la democracia auténtica. Soy Jorge Enrique Robledo, y no me van a silenciar.

Bogotá, diciembre 19 de 2009.