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CONFUNDIR LA MAGNESIA CON LA GIMNASIA |
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Nuestros comentaristas e informadores tienen la tendencia a relacionar nuestros casos con modelos extranjeros, al parecer más por lo fácil que es 'venderlos' que por el haber estudiado los parecidos y las repercusiones que pueden tener en nuestro medio. Es lo que ha pasado al comparar las instituciones americanas, tanto las políticas como las jurídicas, sin tener en cuenta que nuestras tradiciones y mentalidad difieren de todo el mundo anglosajón. Un Estado Federal con autonomía de los diferentes Estados es diferente de uno de una República Unitaria como el que describe nuestra constitución. Un sistema de derecho jurisprudencial y consuetudinario no es lo mismo que uno basado en códigos y leyes. Una administración de Justicia que se fundamenta solo en la funcionalidad no es equiparable a una que busca lo moral y socialmente justo. Ahora con respecto al 'Proceso de Paz' se oyen insistentemente referencias a las soluciones encontradas en Suráfrica, con el ETA o en Irlanda para adelantar el argumento de 'si allá pudieron, porqué nosotros no vamos a poder'. Lo que pasa es que al hacer así el planteamiento se dirige la atención hacia lo único en lo que se parecen -la existencia de un enfrentamiento civil-, pero se desvía de lo que sería la respuesta que se busca. La cual sería: porque se reconocieron sus causas y se transaron o conciliaron las posiciones que los enfrentaban. El apartheid excluía de derechos a una parte de la población por razones raciales. Y lo que se negoció, tras reconocer que el racismo no debía existir, fue acabar con él. Se reconocióla causa, se calificó lo indeseable de ella, y se corrigióel mal. En España se llegó a una paz sin negociaciones, en la medida que las reformas del gobierno central reconocieron que sin concesiones a la autonomía de unas características nacionales particulares no terminaría el enfrentamiento con los radicales vascos. Hoy, sin entrega de armas y sin un tratado votado o refrendado de ninguna manera, la insurgencia cesó sus acciones y el resto de la población no esta pendiente de qué castigo se les debería imponer. Aún más desplazadas son las comparaciones con los acuerdos logrados en el caso de Irlanda del Norte. Lo que había -y sigue habiéndola- es una confrontación de 700 años por motivos religiosos. Diferencias que se volvieron de adhesiones políticas a los
bandos que las representaron, y dada la identidad en el protestantismo
Anglicano entre la cabeza de esa Iglesia y la cabeza del Estado, la
división terminó siendo alrededor de la lealtad hacia
el Rey. Lograron en 1922 un primer arreglo partiendo la isla, dejando
la República de Irlanda como país independiente e Irlanda
del Norte como parte del Reino Unido de acuerdo a las mayorías
existentes en cada territorio. Pero el conflicto siguió con
el IRA -la fuerza armada insurgente- por las mismas razones en la
parte sometida a la Corona. Y sobre ella es que también se
logró recientemente un proceso de paz que reconociendo que
los irlandeses tienen un carácter nacional propio permitiósu
permanencia pacífica dentro del Reino Unido. 21 de octubre de 2013. |
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