WASHINGTON PONE AHORA SUS OJOS SOBRE EL ALCA, LUEGO DE IMPONER EL CAFTA |
||
Para la administración
Bush, la aprobación del acuerdo de libre comercio con los países
de Centroamérica (Centraomerican Free Trade Agreement, Cafta) tiene
más importancia política que económica, puesto que
los países centroamericanos suman apenas el 1,9% del comercio internacional
de Estados Unidos.
David Fleischer, analista político de la Universidad de Brasilia considera que con la aprobación del CAFTA, Washington tiene ahora el sartén por el mango y en consecuencia, "EEUU percibe el ALCA como un plato suculento y viene intentando comer de sus bordes por medio de acuerdos bilaterales y más pequeños de libre comercio con Chile, el Cafta y el plan de comercio Andino, de manera de desgastar lentamente el liderazgo que Brasil y Argentina tienen en América Latina". |
|
|
NUEVA ARREMETIDA NEOLIBERAL Esta es una nueva etapa de los Estados Unidos en la que trata de impulsar otra arremetida a favor del libre comercio a lo largo y ancho de América Latina. Si bien el Presidente Bush consiguió dar un paso político importantísimo en su intento de retomar el ALCA, no es menos cierto que la oposición interna a los tratados de colonización de América Latina también se ha fortalecido. El Sindicato Nacional de Campesinos de Estados Unidos argumenta que pequeñas familias del agro se verán afectadas por el Cafta, mientras que activistas que luchan contra el Sida están en contra de cláusulas que aumentan el control de medicinas genéricas. Para los grupos críticos, la aprobación del Cafta se convierte en una bomba de tiempo por sus implicaciones migratorias. En un lapso no muy lejano, el acuerdo provocará una avalancha de inmigrantes hacia Estados Unidos luego de que quiebren las débiles economías centroamericanas, especialmente los agricultores imposibilitados de competir con la tecnología de avanzada y los subsidios de sus "socios" comerciales del norte. La oposición norteamericana también está preocupada por la pérdida de empleos que supondrá la competencia de mano de obra más barata de los inmigrantes provenientes de El Salvador, Honduras, Costa Rica, Guatemala, Nicaragua y República Dominicana. Los críticos del plan esperan que se repita la historia del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, México y Canadá conocido como TLCAN, que elevó el número de inmigrantes mexicanos. Según estadísticas, 10 años después del TLCAN se perdieron más de 1,3 millones de empleos y más de dos millones de personas cruzaron la frontera estadounidense en busca de mejores oportunidades. Hace más de una década el Nafta era visto como una promesa. Hoy, son legión los que lo consideran como una amenaza y la causa principal de la precarización laboral, la pérdida de empleos y la concentración de la riqueza en muy pocas manos. "Hemos aprendido de los errores del TLC entre EEUU, Canadá y México. Se nos dijo que la firma de este Tratado supondría aumento en los ingresos de los trabajadores, aumento de las fuentes de empleo y una reducción sustancial de inmigrantes y refugiados económicos. Hoy, sin embargo, hemos visto cómo se han destruido más de 750 mil fuentes de empleo en EEUU y la inmigración del sur hacia el norte sigue creciendo", asegura la congresista demócrata por California Hilda Solís.
|
||
CAFTA |
A MERCED DE LAS MULTINACIONALES
La organización no gubernamental Red Sinti Techan sostuvo en un comunicado que este TLC amenaza el marco constitucional salvadoreño y la integración de la región. Mediante los capítulos de inversión y de compras gubernamentales se pueden privatizar servicios públicos que afectan derechos económicos, sociales, culturales y comerciales, indicó el representante de Sinti, Abraham Brego. |
|
|